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18/12/08

Badbeats: RAP FINO FROM VALDIVIA CITY

Hasta el 2005 Valdivia dormía tranquila y sus días transcurrían sin mayor emoción, pero ese año la pluma creativa de Francisco Paredes, la rima ácida e inteligente de Andrés Ojeda y las bases melodiosas de Javier Neira despertaron a la ciudad de su letargo y dieron vida a Badbeats: el trío rap más famoso del sur de Chile. Con discos, demos y giras a otras ciudades del país se hacen espacio en un mercado difícil, pero como ellos mismos rapean “Valdivia traumatizada está Badbeats haciendo estragos”.



Corre el 2005 y Valdivia duerme bajo sus noches sin saber que no son sólo los grillos los que cantan. La ciudad ignora que letras clásicas como “vivan los bomberos que apagan el fuego” no son lo único que tenemos en música. Ese año varios grupos hip hop se juntaron con la idea de formar un colectivo que le entregara una propuesta diferente al mercado musical valdiviano y nacional. De los doce músicos que tuvieron la intención el grupo se redujo en forma abrupta por diversos motivos. Sólo quedaron tres. Asi nació Badbeats, un hijo que encontró tres padres talentosos: Francisco Paredes (Katen), Andrés Ojeda (PDFulltime), y Javier Neira (Arzet), cada uno con unos dones marcados y capaces de producir sonidos envolventes inspirados en el rap negro.

En aquel tiempo Neira era miembro de “Grogies”, Ojeda lo era de “Délforo ingesta” y Paredes de “Trata de Blancas”. Habían cantado juntos produciendo temas como “Check” de Ojeda y Neira, Paredes con Neira con “Antisocial de mierda”, y Paredes con Ojeda con “Agua Sucia”. Sólo Check presentaba una temática diferente pero las dos siguientes eran directamente una crítica social, pero con el nacimiento de Badbeats, si bien la critica muchas veces está entrelíneas ya logran reconocerse letras armónicas y suaves con bases cercanas a la fusión rap soul.
Luego de un arduo trabajo y de la creación de un demo de 8 canciones titulado “De vuelta al beat” la paciencia dio frutos. En el estudio artesanal en la casa de Neira, sin calefacción y sin Fondart ni ningún otro fondo imaginable, estos tres talentos ven nacer su primer disco durante 2007, “El Letrero”.

Track 1: “Subir de nivel sin necesitar de billeteras”

Así reza un tema del disco “El Letrero”, que cuenta como llegaron a lo que hoy tienen en su currículo. Con este disco lograron afianzarse aún más y no demoraron las giras donde llegaron hasta Punta Arenas. Tierras australes los recibieron y corearon sus temas. Esto porque además de no contar con ningún apoyo monetario, actúan sin fines de lucro y sus discos están en plataformas Web de manera que se obtengan gratuitamente. También cantaron en Temuco y Pucón pero las cosas no han sido simples. Neira manifiesta que “hemos tenido que entrar de a poco a la escena musical pero no con la idea de competir sino de aportar”.
Para Ojeda en cambio el tema pasa por la aceptación del estilo “en Valdivia tenemos público pero existen muchos prejuicios con el estilo”.
“El letrero” además cuenta con el tema “Yo no tengo ni un 20” que tiene su propio video, producción a cargo de Tomás Arcos y de Diastristes producciones. Por supuesto todo valdiviano y sin fines de lucro, es decir, por amor al arte, en este caso al rap. El video fue uno de los más vistos en Youtube y fue clave en dar a conocer la existencia del disco.
Precisamente por este video es que el periodista Rodrigo Piña, quien por esos días producia un disco con los mejores exponentes de la música naciente del sur de Chile, se fijó en este trío. Neira manifiesta que “Rodrigo me llamó y me dijo que quería integrarnos al disco y que había visto nuestro video”.
Así Badbeats participó junto a otras bandas en el disco Sur Vivo, proyecto de Rodrigo Piña y financiado por el Fondo de Fomento de la música nacional del Consejo Nacional de la Cultura y Las Artes. De un total de 30 bandas, sólo 10 fueron consideradas.


Track 2: “Letras, vocales, todo vale en la jungla de las notas musicales”

Luego del éxito del disco anterior, Badbeats ya dio vida a “Cassual”, un demo que para la temporada estival ya debiera tener 15 canciones según mencionó Paredes.
Nuevamente sorprenden con temas como “Santofinde”, “Hacértelo”, “OK”, e “inspiración”, entre otros. Estas serán las encargadas de preparar el camino para el lanzamiento de un segundo disco a fines de año y la reedición de Cassual. Esta vez la idea es la comercialización formal de los discos, según cuenta la banda.
Para este mes de octubre, en tanto, Badbeats espera deleitar al público valdiviano en la Casona Verde donde se realizará la Madamfunky Party. Allí pondrán en el escenario toda la potencia de sus temas caracterizados por temas que se inflan y se desgarran en armónicas bases.

El amor al arte existe, y Badbeats es prueba de ello, pero a la vez son la prueba de la constancia de jóvenes músicos que hacen del Hip Hop una conducta y un estilo de vida que se mantiene y no tiene que ver con modas pasajeras. Aunque Badbeats aún es más reconocido en otras ciudades que en su propia casa falta poco para que se tomen definitivamente la ciudad.
Estos son los sonidos clásicos from valdivia city. Esto es Badbeats que desde una caseta húmeda se introducen en la historia artística valdiviana.
El track 3 lo eliges tú…






Por Bárbara Alejandra Agüero


199 RECETAS PARA SER FELIZ: LA ÚLTIMA RECETA LA PONES TÚ



Historia de amor y odio que transcurre en el caluroso verano de Barcelona, donde una pareja de periodistas luchan por el día a día quienes son Tomás en la actuación de Pablo Macaya y Helena, en la actuación de Tamara Garea.

Con tres años fuera de contacto con sus seres queridos, Tamara recibe una carta, mensaje que llega desde Chile avisándole la muerte de su hermano menor, conocido como Milo. Éste, tenía una relación de pareja con Sandra (Andrea García Huidobro) quien tras saber la noticia, viaja hasta España a vivir el duelo con su cuñada, lo cual significó un cambio radical en la cotidianeidad de esta pareja de periodistas.





Tomás, quien trabajaba como editor en una revista y que era el anfitrión oficial del libro a publicar de su mejor amigo, cumple con el homónimo de la película. Libro llamado “199 recetas para ser feliz”, donde dicha publicación se convierte en la pauta ideológica del desarrollo del film y también como especie de mensaje subliminal del relato al escuchar a su propio autor en off leyendo alguna de estas recetas tan fundamentales.

Receta Nº 6: Aprende a vivir la vida en borrador, por más que lo intentes, nunca tendrás tiempo para pasarla en limpio.

¿Qué es la felicidad? ¿Cómo podemos reconocer los síntomas de la felicidad? ¿Cómo podemos esforzarnos día a día para ser un poco más felices? Son algunas de las preguntas que se resuelven en el relato cinematográfico de esta historia, que mezcla amor, confusión, ambigüedad, y componentes cotidianos tan perfectos, que hacen arder la silla de los críticos conservadores de nuestro país, debido a su contenido sexual y explicito, pero que sin duda sirve como herramienta para contar una historia que se carga de sentimientos fuertes en sólo cuatro paredes.
La eficacia conceptual del cine explícito se regenera a través de la obra de su director Andrés Waissbluth, quien es en su trabajo anterior de “Los Debutantes” establece una diferenciación de contenidos, ya que opta de lo violento y superficial de la pareja, a lo mas profundo y sentimental de un triangulo amoroso, que desde un principio escala nuevas experiencias y que de manera paulatina sube la temperatura de las escenas, lo cual finaliza en lo que muchos esperaban como fin de una narración como esta.






Receta Nº 9: Alcanzarás la felicidad al darte cuenta de que nada es demasiado importante.

Rescatando en aspectos técnicos, la fotografía queda bien parada como instrumento de valor agregado a escenas que transcurren en pocos lugares. Un matiz muy sublime en el color de la ropa, las calles españolas, las paredes de la casa, etc. Además de qué forma, este recurso ayuda a crear un hilo conductor con la experiencia de los personajes, frente a la experiencia del espectador que se convierte en cómplice de los hechos.



Lo paradójico, es que libro del amigo de Tomás nadie lo compra, por lo cual surge efecto de acción sólo en este triángulo amoroso, en un principio con juegos de seducción, y en un fin con el engaño placentero de Tomás y de Helena. Las imágenes de sexo son muy explicitas, lo cual determinó al consejo de calificación cinematográfica, dejarla como película para mayores de 14 años, ya que además posee escenas lésbicas las cuales son atrayentes para el cine nacional, pero no tanto para los críticos conservadores.

Su rechazo o adherencia constituye una especie de vanguardia o nueva apuesta cinematográfica al momento de establecer esa doble lectura de querer contar una historia cotidiana, pero no con imágenes tan cotidianas. La maldita obsesión de Sofía por no soportar el duelo de su pololo, convierte la relación de su cuñada en un infierno que duele mucho, pero que ese dolor tiene un cierto porcentaje de placer con culpa. Sin duda el mensaje que deja el film “199 recetas para ser feliz” es el de conocer los sin limites que deparan las relaciones humanas de nuestra actualidad, donde hechos tan cotidianos como un duelo, pueden transformar o mas bien dicho, deformar el funcionamiento de una pareja.

Al terminar la película, nunca se sabe cuál es la receta Nº 199. de hecho, sus protagonistas en el 15 Festival de Cine de Valdivia afirman que la ultima receta la pones tú como especie de moraleja o enseñanza que te deja la historia y sus tan controversiales personajes.


Antonio Santana

QUIENES HICIERON POSIBLE ESTA EDICION

QUIENES HICIERON POSIBLE ESTA EDICION
Barbara Aguero, Barbara Delgado, Antonio Santana, Melissa Cardenas y Tamara Moreira

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